El parto natural es una forma de tener hijos de manera natural, confiando el proceso a la naturaleza, sin medicamentos ni tecnologías. Consiste simplemente en buscar un contacto con la naturaleza y la naturalidad del parto en el momento de la concepción.
La mujer que utiliza el parto natural confía en la respiración controlada y la relajación para controlar los dolores del parto, no en medicamentos. Es una decisión de muchas mujeres a la hora de tener sus hijos, aunque muchas otras prefieren hacerlo con las técnicas que existen hoy en día.
La mujer en el parto natural tiene mayor poder de decisión en cuanto a lo que se va a realizar, además de tener un parto sin medicamentos ni tecnologías que muchas mujeres consideran innecesarias.
La mujer que haga un parto natural debe tener:
- Un entorno y ambiente apropiado y que favorezca al parto
- Seguridad y apoyo emocional
- Intimidad
- Libertad de movimientos. Lo ideal es la posición vertical en el parto
- Asistencia profesional experimentada en el parto natural, o al menos una persona respetuosa
- Utensilios o procedimientos naturales para reducir el dolor
- Todo lo necesario para el parto y después de él
Hay que tener en cuenta que este tipo de parto es una decisión, una opción personal de la persona, y hay que respetarla. Además, hay que contar con el mayor apoyo y el mayor respecto por parte de todas las personas que formarán parte del proceso.
Existen actualmente hospitales que ofrecen la modalidad de parto natural como una nueva opción para las madres hoy en día. Ofrecen todas las condiciones para que se pueda realizar el parto de manera natural a menos que surja alguna complicación que lo impida.